martes, 5 de noviembre de 2013

carta a juares - Las tropas francesas se preparan a subir a las cumbres.

Las tropas francesas se preparan a subir a las cumbres.
Cumbres de Acultzingo, abril 28 de 1862.
Ciudadano Benito Juárez
 México

 Mi estimado amigo:
 Oficialmente participo que en la mañana del día de ayer, el ejército francés se movía de Orizaba hacia las Cumbres, pernoctando en Tecamalucan a tres leguas de distancia de ellas; hoy continuó su marcha acampándose, para esta hora que son las doce del día, al pie de ellas. Ya tenía previsto este caso, y desde anoche ocuparon posiciones la poca fuerza de 2,000 hombres que puedo destinar a disputarle el paso; esto (se) intentará probablemente en la noche de hoy o mañana muy temprano; mas ya estoy preparado y no será difícil que fuercen el paso, aunque les costará caro, porque estoy resuelto a hacerles la mayor resistencia que fuera posible.

 Ya usted sabrá que el último paquete ha traído la noticia de que el gobierno español desaprobó la conducta del honrado y caballeroso general Prim; con que indudablemente tendremos que habérnoslas con dos enemigos diferentes además de los propios y conviene, por tanto, que se prepare el ánimo de toda la nación y se apresten cuantas fuerzas y elementos de guerra se cuenten en ella, para triunfar o sucumbir con honor; el sustituto del general Prim en el mando de las fuerzas españolas que ocupan aún nuestro territorio, es el general Vargas Machuca, mientras llega el general Godet nombrado sustituto en propiedad.

 Ya he dado las órdenes correspondientes al 2º (segundo) cabo de la comandancia general de Veracruz, para que ordene a las fuerzas avanzadas por la vía de Jalapa observen los movimientos de este nuevo enemigo, batiéndolo, si intenta internarse e impidiendo toda comunicación con Veracruz que fuere perniciosa. Consérvese usted bueno, y disponga como siempre del afecto de su amigo y servidor que lo aprecia.

 Ignacio Zaragoza

 Aún no se han incorporado las fuerzas que trae Lamadrid, pues, según parece, permanece en Puebla; me hace falta lo mismo que me hacen por lo menos 100 artilleros, porque con la deserción han concluido las dotaciones que nunca estuvieron completas.

 Ignacio Zaragoza